¿Qué es un compresor y para qué sirve?

Un compresor de aire es un dispositivo que crea y mueve aire presurizado. Cuenta con un motor que puede ser eléctrico o de combustión. Genera aire a una alta presión que se emplea para aplicar una gran fuerza a la hora de utilizar diversas herramientas, alimentar  aplicaciones e industria. El compresor también tiene aplicaciones domésticas como pueden ser el inflado de neumáticos, el uso en grapadoras, pistolas de pintura o pistolas de clavos.

De este modo, el compresor de aire permite que los trabajos se desarrollen de un modo más rápido, eficiente y con un coste menor.

¿Qué tipos de compresores hay?

 Los compresores se dividen en grandes rasgos en dos tipos:

• Compresor dinámico. Es aquel cuyo funcionamiento está basado en la aceleración molecular. El aumento de la presión se produce mientras el aire o gas fluye. Trabaja a una presión constante. En este caso existen diferentes tipos de compresores y accesorios:

• Compresor centrífugo

• Compresor axial

• Compresor de desplazamiento positivo. Tiene como principal característica la disminución del volumen de aire de la cámara de compresión que está confinado para su funcionamiento. Al hacer esto aumenta la presión interna hasta alcanzar el valor de diseño esperado. Es en este momento cuando se libera aire en el sistema. Existen diferentes tipos de compresores:

• Compresor de pistón

• Compresor de paletas

• Compresor de tornillo

• Compresor reciprocante

• Compresor scroll

 ¿Cómo reducir el ruido de un compresor de aire?

Una de las características más comunes de los compresores de aire es que son bastante ruidosos. Algunos existentes en el mercado han conseguido minimizar el ruido que emiten, pero si aún así te resulta molesto vamos a darte algunos consejos para reducir la molestia.

• El más básico de todos es utilizar protección auditiva. En muchos trabajos, sobre todo industriales, la protección auditiva es esencial. Si no quieres que se resienta este órgano con el ruido a la hora de trabajar, hacerte con una buena protección es indispensable.

• Instalar silenciadores de admisión. Puedes instalar un silenciador en la válvula de admisión para controlar los ruidos pulsantes de alta frecuencia que produce el compresor de aire. En el compresor el aire que entra pasa por una válvula de lengüeta que vibra con cada pulso, generando ruido.

• Construir recinto cerrado e insonorizado para el compresor. Con esta solución el compresor queda estanco dentro del cubículo amortiguando el ruido. Para ello, es conveniente el uso de espuma o goma insonorizada. Algunos recomiendan como técnica más rudimentaria envolver el compresor en un manta para así evitar el ruido pero se trata de una forma menos profesional.

• Mantener el compresor alejado de tu zona de trabajo. Si el espacio te lo permite, mantén el compresor de aire en otra habitación lo suficientemente alejada del lugar de trabajo. Eso hará que el ruido sea menor respecto al trabajador.