07 May Remachadora de tuercas, neumática, manual… ¿Cuál debes elegir?

Unir dos piezas puede ser cuestión de segundos. Una remachadora es esa herramienta que debes tener ya que puede ayudarte en cualquier momento y con cualquier problema doméstico o, incluso, profesional. ¡Si quieres saber más sobre estas útiles herramientas sigue leyendo! Además, al final del artículo te enseñamos cómo se utiliza una remachadora y te mostramos un vídeo.

¿Qué es una remachadora?

Si nunca has visto una remachadora o no sabes cómo funciona no te preocupes: estamos para ayudarte. Esta herramienta consiste en unir dos piezas con la condición de que no tengan que ser desmontadas (en este caso habría que romper los remaches). Como hemos mencionado, es más que recomendable tener una herramienta de este tipo ya que se puede utilizar en cualquier momento. La herramienta protagonista del artículo de hoy, actúa sobre un tubo cilíndrico conocido como remache.

Un remache es el elemento de fijación que actuará sobre las piezas que quieras unir.  Se trata de un tubo cilíndrico (vástago) con una cabeza en el extremo. Los diferentes tipos de remaches que puedes encontrar variarán en función de la pieza en la que quieras trabajar. Por tanto, los remaches se clasifican según la forma de su cabeza y su material: aluminio, latón, acero, cobre…

¿Qué tipos de remachadoras hay?

En función de las piezas que necesites unir, tendrás que elegir un tipo de remachadora u otra. Nosotros te facilitamos la búsqueda y te detallamos las variantes más relevantes:

Remachadora manual

Si has visto pocas remachadoras, la manual es la que, probablemente este en tu mente. Se trata de una herramienta de dos mangos robusta y ergonómica. Para que sus mangos sean ergonómicos, tienen que tener parte de plástico o tela flexible para que estos no resbalen y puedas utilizarlo durante más tiempo y en mejores condiciones. Como remachadora manual, os destacamos esta con cabeza giratoria. La ventaja de esta característica es que te permitirá alcanzar lugares donde una remachadora tradicional no podría trabajar.

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Remachadora de tuercas

Para hablar de remachadoras de tuercas ponemos como ejemplo la T-105 de Bralo. Es una herramienta manual tipo alicate, enfocado a la unión de piezas mediante tuercas. Tiene una capacidad de remachado de M-3, M-4, M-5 y M-6. La “M” indica el diámetro nominal de la rosca exterior de la tuerca. Pincha aquí si quieres saber más sobre la rosca métrica.

Remachadora a batería

Ideal para la construcción. Con esta herramienta ahorrarás tiempo, esfuerzo y duplicarás tu productividad en el trabajo. La característica principal es que no tienes dos mangos para hacer presión: funciona con una batería y se acciona mediante un gatillo, como si de un taladro se tratara.

Remachadora neumática

A diferencia de la manual, la remachadora neumática se acciona mediante un interruptor o gatillo. De esta manera trabajarás con más comodidad, mas velocidad y con menos esfuerzo. Es necesario contar con un compresor de aire y una manguera para que el aire llegue a la remachadora. De tal manera que la herramienta funcione a la perfección, sea rentable y perdure en el tiempo, es recomendable contar también con un lubricador.

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¿Cómo se usa una remachadora?

Su mecanismo es muy sencillo. Antes de utilizarla asegúrate de tener los materiales necesarios: un taladro, una broca adecuada, la remachadora que mejor se adapte el tipo de piezas que quieras unir y los elementos de fijación óptimos: los remaches.

1. Comienza taladrando y agujereando las piezas que quieras unir.
2. Elige el remache que mejor se amolde al tamaño de las piezas que quieras unir. Para ello, es necesario que tengas muy en cuenta la cabeza del remache, la profundidad y el diámetro.
3. La mayoría de los modelos de remachadoras vienen con boquillas intercambiables en función del remache que elijas. Para saber cuál es la indicada puedes ir probando cada vástago y escoger el que más ajustado quede. ¡Selecciona la boquilla más indicada!
4. Una vez el remache esté en la boquilla, tendrás que apretar ligeramente los brazos de la remachadora para ajustarlo completamente.
5. Finalmente, cierra los brazos de la remachadora. Verás como se deforma el remache y tus dos piezas se unirán. En el momento en el que el vástago se rompa, tus piezas quedarán unidas.

¡Así de sencillo es usar una remachadora!

Si has acudido a este artículo para resolver tus dudas a la hora de trabajar con una remachadora, esperamos que te haya servido de mucha ayuda. Si eres un apasionado del bricolaje tal vez te pueda interesar este artículo sobre los cinco accesorios más útiles.